Ensayo El Perfume
A continuación, en este ensayo, escribiré sobre la obra de
Patrick Suskind, El perfume, enfocado desde el punto de vista del artículo “
El olor como
símbolo de identidad: El perfume. Historia de un asesino de Patrick Suskind”.
Desde el comienzo de la novela, Grenouille, muestra un gran
talento con el olfato y le es posible
identificar todos los distintos olores de las personas y sitios a lo largo de
la novela, excepto el suyo propio hasta que se da cuenta que no tiene olor
propio. A lo largo de la novela, Grenouille mata a varias mujeres jóvenes y
vírgenes con la intención de captar su olor y guardarlo en su recuerdo. Después
de varios acontecimientos en la novela es capaz de crear ciertos perfumes que
le hacen integrarse en una cierta clase social o situación deseada.
Esto nos podría hacer pensar que si por ejemplo asistimos a
algún lugar en concreto, lo primero que usaríamos para juzgar ese sitio sería
la vista y lo segundo el olfato. El olfato podría tener mucha importancia a la
hora de juzgar ese sitio. Si es un lugar donde no se pueda encontrar un olor
desagradable o sucio, será de nuestro agrado y si recibimos un olor a sucio,
orina o simplemente desagradable, podremos intuir que la zona en la que nos
encontramos no es de clase alta ya que no es mantenida y que está descuidada.
Lo mismo podría ocurrir con una persona: digamos que caminando pasamos por al
lado de una persona, dependiendo de su olor podremos intuir muchas que cosas
que por el sentido de la vista quizás no podríamos haber detectado, como si
huele a ladrillo podremos intuir que tiene como oficio la construcción. La
vista y el olfato se juntan para formar la primera impresión ante alguien, algo
o alguna situación. Pero, ¿y si estas personas, lugares o situaciones no
tuvieran el olor que tienen la primera vez que las conocemos?, ¿coincidiría la
primera impresión que tuvimos cuando también lo captamos por el olfato que
ahora sin el olor?
Grenouille se da cuenta de cómo actúa la sociedad en la que
vive frente a los distintos olores de las personas y el juzgamiento o intuición que realiza la gente, dependiendo
del olor:
Primero elaboró un
olor discreto, un aroma gris para uso cotidiano. […] Oliendo así
podía mezclarse
tranquilamente con los demás seres. […] Podía ocurrir que pasara
completamente
inadvertido, […] mezcló un perfume algo más fuerte, con un ligero olor a
sudor, […] que hacía creer a todos que
tenía prisa y le apremiaban negocios urgentes. […] Otro perfume era un aroma
que incitaba a la compasión […]. Olía a leche aguada y madera limpia y blanda.
[…] Las mujeres del mercado al verlo le alargaban nueces y peras relucientes
porque se les antojaba hambriento e indefenso (pp. 173-174)
Mediante el control de su propio olor, Grenouille, es capaz
de controlar las intenciones del resto de la sociedad que lo desconoce
personalmente y crea la primera impresión que él mismo desea que tengan. Concluye
la novela con que Jean Baptiste Grenouille se da cuenta que el perfume que
había creado para producir un efecto embriagador y atrayente no iba a hacer que
la gente le quisiese a él, sino solamente a su perfume. Por esto se deja morir
por su propia creación, es devorado por la gente que cree que lo deben de hacer
por amor.
Para concluir creo que aparte de los refranes de ¨Somos lo
que comemos¨, ¨somos lo que hacemos¨, ¨somos lo que vestimos¨. También se
podría aplicar al olfato: ¨Somos a lo que olemos¨.
Jean-Christian Whitehouse Posse
No hay comentarios:
Publicar un comentario